Por: Luis Pinate
Dentro de la mente tenemos tres niveles diferentes de conciencia:
1. Consciente:
es la parte que le da sentido a todo lo que estamos viviendo sin necesidad de esforzarnos. AcĆ” es donde podremos reproducir todo lo que percibimos, lo que pensamos y lo que recordamos.
2. Subconsciente:
Esta puerta te da acceso a aquellas cosas y vivencias que has tenido y que por el momento permanecen olvidadas. Es decir, hay informaciĆ³n que entrĆ³ por tu mente consciente y que por el momento estĆ” desaparecida. Con esfuerzo, podrĆas regresar esta informaciĆ³n a tu consciente nuevamente.
3. Inconsciente:
Ocupa el mayor espacio en nuestra mente y es donde tenemos almacenadas millones de vivencias desde que nacimos y que no son recordables. Los impulsos, tendencias, impresiones, pensamientos que no controlamos y los recuerdos que reprimimos estĆ”n en este espacio. Esta Ć”rea es la que mĆ”s se trabaja desde el lado de la psicologĆa, para investigar en nosotros mismos el por quĆ© de nuestros comportamientos.
Lo que como seres humanos debemos entender es la importancia que tiene nuestra mente en todos los aspectos de nuestra vida. Nuestros pensamientos se manifiestan en acciones, y mientras mƔs fuerte es este pensamiento mƔs impacto generan nuestras decisiones.
Es por esto que a continuaciĆ³n vamos a ahondar en la significatividad de trabajar nuestro consciente para lograr cambios en el subconsciente.
Somos el resultado de toda la informaciĆ³n guardada en el subconsciente e inconsciente, pero esta no nos define como personas. Al cambiar las creencias y conductas que tenemos instaladas, tambiĆ©n cambiamos la forma en que vemos el mundo y, en consecuencia, nuestra realidad.
EstĆ” comprobado que la calidad de la informaciĆ³n y experiencias guardadas tiene impacto significativo en cĆ³mo le damos continuidad a nuestra vida, a nuestra capacidad de curarnos de enfermedades y dolencias y, finalmente, en la capacidad de crear lo que deseamos para nosotros.
Como dijo Marcel Proust: āAunque nada cambie, si yo cambio todo cambiaā.
CĆMO CAMBIAR NUESTRO SUBCONSCIENTE
Empecemos con una regla de oro: si yo cambio, mi subconsciente cambia. Pero, ĀæcuĆ”ndo usamos el subconsciente? Siempre que generamos una respuesta que no requiere de nuestro pensamiento racional. Por ejemplo, cuando trastabillamos en la calle o en una escalera e inmediatamente realizamos movimientos con el cuerpo para mantener el equilibrio. No es algo que hagamos racionalmente, simplemente nuestros reflejos actĆŗan por sĆ solos porque es algo que incorporamos desde que somos bebĆ©s y aprendemos a caminar.
Comenzar a programar esta Ɣrea del cerebro requiere que estimulemos nuestro consciente:
Encontrar nuestras debilidades: Vivimos rodeados de miedos y prejuicios. Es menester que identifiquemos esas falencias de nuestra mente para avanzar a la prĆ³xima etapa de visualizaciĆ³n.
VisualizaciĆ³n:
Sabemos lo que nos perturba, es hora de imaginarnos cĆ³mo queremos vivir. Cerremos los ojos, inspiremos hondo y pensemos a dĆ³nde es que queremos llegar. Marquemos un objetivo claro y vayamos con nuestra imaginaciĆ³n hasta Ć©l, sin miedos ni frustraciones. Nadie puede impedir que llegues hasta la meta.
Auto-motĆvate:
Somos nuestra propia aficiĆ³n y debemos arengarnos. Todos tenemos contratiempos cuando nos dirigimos hacia un objetivo, lo importante es que estos no nos afecten, sino que nos potencien. Inventarnos frases nos va a ayudar a no dejar de intentar: āSoy el mejor para estoā, ānadie puede quitarme la felicidadā, āsoy el verdadero dueƱo de mi vidaā, ānada es imposible para mĆā.
Vivir el presente:
La ansiedad puede ser uno de nuestros peores enemigos. Este fenĆ³meno se da cuando la mente quiere ir mĆ”s rĆ”pido que el tiempo. Es importante que controlemos nuestros niveles de ansiedad y nos traigamos al āaquĆ y ahoraā. Podremos enumerar todas las cosas que tenemos en el presente y que amamos para volver a traer nuestra mente a tiempo y espacio.
Aleja pensamientos negativos:
Debemos enfrentar los miedos. Cada vez que somos negativos, ese pensamiento se almacena en nuestro subconsciente. āEsto no es para mĆā, āno puedo hacerloā, āes imposibleā. Todas estas frases se perpetuarĆ”n en nuestra mente y, la prĆ³xima vez que queramos lograr un objetivo, estos emergerĆ”n para llenarnos de dudas y miedos. Recuerda que cada vez que creamos un pensamiento negativo en nuestro subconsciente, este tarde o temprano aparece en nuestra mente racional.
No se trata de vivir una vida positiva tĆ³xica, pero sĆ de entender el impacto y la importancia de los pensamientos negativos para nuestra mente y nuestro desempeƱo posterior.
MENTE SANA, CUERPO SANO
āMens sana in corpore sanoā. NaciĆ³ en la Roma imperial del siglo II y pregonaba justamente lo que dice: disponer de un espĆritu equilibrado en un cuerpo equilibrado.
El estrĆ©s es una de las causas principales de enfermedades crĆ³nicas como el cĆ”ncer. El agobio mental, el miedo, el odio y toda percepciĆ³n negativa genera quĆmicos tĆ³xicos en nuestro cuerpo que terminan por enfermarnos.
CONCLUSIĆN
El cuerpo humano es una mƔquina perfecta, por eso hemos sobrevivido en la Tierra por mƔs de 300.000 aƱos. Nuestra mente es el motor de esa mƔquina perfecta, por tal motivo es de suma importancia que trabajemos en ella cotidianamente para hacerla cada vez mƔs fuerte.
Resetear nuestro subconsciente serĆ” vital para lograr todo lo que nos propongamos. Incluso tambiĆ©n serĆ” fundamental para afrontar problemas de salud. Recordemos que aquĆ se albergan todos nuestros traumas de la infancia, todas las veces que nos dijeron que no, nuestros miedos y prejuicios. Hay que trabajar de manera constante en erradicar todos estos archivos basura de nuestra mente para poder progresar.
En nuestro programa āTransformaciĆ³n Exponencialā
dedicamos dos de los ocho mĆ³dulos a trabajar en todos los aspectos relacionados con la mente consciente y
subconsciente. A darle mayor protagonismo al primero e intervenir este segundo a travƩs de herramientas que nos permitan reprogramarlo y cambiar nuestro mindset.
Luis Pinate
Consultor EjecutĆvo y EstratĆ©ga
Agile Consultants Group
Miami - Florida @agilecng